7 pasos para hacer sus proyectos de CMS más modulares

Incluso las organizaciones con tecnologías monolíticas suelen tener uno o dos componentes independientes. Cuando una empresa adopta la componibilidad, no hay vuelta atrás, ya que ser composable es sinónimo de flexibilidad, agilidad y personalización. 

Aquí se encuentran los siete pasos para hacer proyectos modulares o componibles. 

Qué significa ser composable o modular

Las empresas con arquitectura MACH (microservicios, API-first, cloud-native y/o headless) que adoptan la tecnología componible optan por soluciones fragmentadas y modulares. Se trata de piezas pequeñas en lugar de grandes plataformas. 

Un enfoque componible implica un stack tecnológico formado por herramientas creadas específicamente para una única función, como un CMS headless para almacenar y estructurar el contenido o  un motor de personalización para adaptar la mensajería a usuarios específicos. 

Cada componente es como una herramienta de una caja de herramientas. Pueden utilizarse, eliminarse o reorganizarse, según sea necesario, para crear experiencias y agilizar los procesos. 

Los componentes se conectan de forma ideal mediante API 's  fáciles de desarrollar que proporcionan una integración sencilla, sin necesidad de un desarrollo pesado ni una carga de datos por lotes.

Una plataforma de contenido componible como Contentful maneja el contenido desde múltiples fuentes y lo publica en cualquier canal digital, garantiza que el contenido sea detectable y reutilizable, proporciona interfaces personalizadas e incorpora la gobernanza mediante la gestión de acceso basada en funciones y flujos de trabajo.

¿Por qué pasarse a desarrollos composable o modulares?

Muchas empresas tienen dudas sobre la transición a una configuración más modular, sobre todo en lo que respecta al tiempo, los gastos y la adopción. 

Los proveedores tradicionales han ampliado sus stacks tecnológicos en un intento de ofrecer una solución universal a los problemas de los clientes, sin embargo, las plataformas resultantes suelen estar fragmentadas y construidas desde el punto de vista del proveedor.

Con un enfoque composable las empresas pueden optimizar componentes pequeños y fácilmente integrables para resolver sus problemas inmediatos y potenciales creando valor para ellas y para sus clientes. 

Una migración incremental permite a las organizaciones obtener beneficios rápidos y a las unidades de negocio, iterar a su propio ritmo, eliminando riesgos y cuellos de botella. 

Las empresas pueden crear su propio ecosistema con configuraciones exclusivas que tienen el potencial de ser un diferenciador masivo en la entrega de experiencias de cliente. 

Si quiere ampliar la información sobre los beneficios de ser composable, lo invitamos a leer: El futuro del comercio digital: composable ecommerce

A continuación se detallan los pasos para ser composable: 

1. Reunir al equipo y repartir las tareas

Crear grupos de trabajo dedicados a tareas como la auditoría tecnológica o la gobernanza.

Consideraciones clave a la hora de formar el equipo

Equilibrio entre las partes interesadas: este colectivo debe extenderse más allá de aquellos que construirán o utilizarán el stack tecnológico. Es importante incluir a los siguientes perfiles: 

• Personas que representen a varios niveles de la organización, no solo a la dirección. 

• Unidades de negocio de distintas marcas, sectores, regiones o departamentos. 

• Personas con un profundo conocimiento sobre las necesidades de los clientes. 

• Personas con influencia cultural que entiendan a la empresa y su gente. 

• Miembros del equipo con experiencia en proyectos históricos. 

• Nuevos talentos con nuevas perspectivas de la empresa. 

Conseguir la aceptación: es importante comunicar expectativas realistas y mostrar cómo les beneficiará el resultado, una vez completado.

2. Auditar la tecnología existente y evaluar qué se necesita

Preguntas de evaluación: 

• ¿Cuándo fue la última vez que se hizo una planificación y qué era importante en ese momento?

• ¿Qué se está tratando de lograr?

• ¿Qué ha cambiado desde la última planificación?

• ¿Qué aspectos del negocio no están satisfaciendo las necesidades cambiantes? 

• ¿Cómo interactúan los usuarios con las plataformas actuales?

• ¿Qué nivel de esfuerzo se requiere para realizar estos cambios?

• ¿Cuánto riesgo se puede tomar?

• ¿Con qué facilidad se puede aislar la funcionalidad impactada?

• ¿Qué se va a necesitar dentro de un año y dentro de cinco años?

3. Decidir los componentes básicos y los principales puntos de interés

Un stack tecnológico sólido es una mezcla de aplicaciones creadas y compradas, donde el cliente se sitúa firmemente en el centro de todo. 

Consideraciones clave para seleccionar los componentes de un stack tecnológico: 

Funcionalidad: 

• Gestión del comercio

• Gestión de la información del producto (PIM) 

• Planificación de recursos empresariales (ERP) 

• Sistema de gestión de contenidos (CMS) 

• Personalización 

• Gestión de activos digitales (DAM) 

• Traducciones 

Flexibilidad: 

Cada uno de los componentes consolidados tiene un propósito muy específico, lo que significa que pueden intercambiarse o personalizarse fácilmente. Sin embargo, el grado exacto de flexibilidad dependerá de las necesidades internas de los usuarios. 

Prioridad:

Con el cambio a composable es más fácil tomar decisiones que se alineen con las necesidades cambiantes del negocio. 

Si se trata de una empresa de comercio electrónico, por ejemplo, es probable que se añada un PIM, un DAM y un CMS desde el principio y, si no se tiene un equipo de personalización, se puede encontrar un proveedor que lo haga, pero se debe estructurar el contenido de forma que, cuando esté listo para conectar un motor de personalización,  se necesite poco trabajo preparatorio.

4. Identificar  el mejor enfoque de implementación 

Las empresas pueden avanzar a su propio ritmo y decidir qué componentes cambiar, además de cuándo y cómo hacerlo. Aquí es donde los resultados de la evaluación resultan cruciales. 

El enfoque ideal no solo debe ofrecer la rentabilidad más rápida, sino que también debe sopesarse con otros factores. Si el mayor retorno de la inversión requiere un enorme esfuerzo de desarrollo, pero el equipo está ocupado en otro proyecto a corto plazo, esto podría afectar la dirección de la migración. 

Un enfoque incremental puede ofrecer efectos pequeños pero cuantificables en un plazo relativamente corto y conllevar menos riesgos, ya que los resultados pueden evaluarse y gestionarse a lo largo de la transición.

Enfoques a considerar: 

• Higuera estranguladora: este enfoque de la migración componible consiste en sustituir gradualmente los servicios hasta que el sistema original queda "estrangulado" y puede retirarse del servicio. 

Este planteamiento puede utilizarse para sustituir un monolito heredado o una plataforma de comercio electrónico mercado por mercado, empezando por el más pequeño. 

Una vez comprobado el éxito, la migración continúa a mercados más grandes hasta que la antigua plataforma deje de ser necesaria. Avanzar por incrementos minimiza los riesgos de la migración y acelera los esfuerzos de desarrollo a lo largo del tiempo. 

• Hilo de acero: en este enfoque el objetivo es migrar toda una experiencia del backend al frontend, como si se tirara de un hilo a través del stack tecnológico. 

Una empresa que utilice este método podría migrar todo su sistema de gestión de contenidos en un solo movimiento. En lugar de sustituir una única capa de funcionalidad, este método se centra en la implementación técnica. 

Es útil para validar diseños y preparar componentes básicos para su posterior desarrollo y puesta en marcha.

• Spike: este método se centra en implementar solo una parte de la solución para tener una mejor idea de su rendimiento. 

Por ejemplo, en una actualización de comercio electrónico, el proyecto podría dar prioridad a sustituir solo el proceso de pago, para asegurarse de que funciona como se espera. 

Este enfoque está orientado a la profundidad, en contraposición a la amplitud y se utiliza para verificar rápidamente las capacidades técnicas. 

• Big Bang: adopta un enfoque de la migración basado en "todo de golpe". Puede ser tan arrollador como sustituir todo un sistema monolítico o tan sencillo como lanzar un sitio web para dar servicio a toda una base de clientes.

Este enfoque conlleva un riesgo significativo y tiene un plazo más largo para obtener valor.

5. Integrar los componentes

Una vez que los elementos componibles están en su lugar, deben vincularse adecuadamente, ya sea mediante la integración punto a punto o a través de la orquestación de la API. 

Un motor de personalización no servirá de mucho sin acceso a los datos de los clientes. Está muy bien tener los mejores componentes en un stack  tecnológico, pero su verdadero valor solo se puede conseguir si están conectados entre sí.

Consideraciones a la hora de conectar: 

• Fuente: una vez que todas las herramientas están en su lugar, es esencial averiguar cuál será la fuente para cada componente. Identificar esto influirá en cómo se gobierna el stack. 

• Facilidad de integración: aquí entra en juego la perspectiva "API-first". Los componentes seleccionados deben tener un sólido conjunto de API. Si no es así, hay que considerarlo como una señal de alarma y probablemente será difícil hacer que el componente funcione dentro del stack. 

• Sistema de diseño: si bien es cierto que un stack tecnológico componible puede existir sin un sistema de diseño, no cabe duda de que es una adición que merece la pena, sobre todo para las marcas globales.

Un sistema de diseño proporciona elementos estandarizados que los diseñadores de toda la organización pueden utilizar para crear experiencias coherentes. 

Mantener un sistema de diseño no siempre es fácil, se debe lograr un equilibrio entre la flexibilidad y la coherencia y debe ser lo suficientemente estricto como para proporcionar uniformidad en todos los puntos de contacto de la marca y, al mismo tiempo, permitir a los desarrolladores encontrar y modificar fácilmente los elementos, según sea necesario.

6. Ayudar al equipo a adoptar la tecnología

El equipo de gobernanza debe comprender los distintos objetivos de los usuarios e incluir a las partes afectadas por los cambios del sistema. Después de trabajar para construir un stack tecnológico preparado para el futuro, el objetivo es que los productos no solo se adopten, sino que se utilicen de forma efectiva. 

Consideraciones clave para la gobernanza: 

• El cambio es difícil: convertirse en composable es una mentalidad. El cambio es psicológico y los nuevos flujos de trabajo pueden hacer que los usuarios se sientan incompetentes o confundidos. Superar este problema va más allá de la formación, se trata de implicar lo antes posible a los afectados por la migración. 

En lugar de informarles del cambio hay que explicarles por qué es necesario y cómo les facilitará el trabajo. La gestión del cambio no es una cuestión de metodología, sino de concienciación y capacitación. 

• Trabajos, no sistemas: se debe pensar en las tareas que hay que realizar y no en los sistemas en sí. El tamaño y la verticalidad de la organización dictarán lo que se necesita. 

Una empresa pequeña no tendrá las mismas necesidades de gobernanza que una gran empresa sanitaria o de tecnología financiera, cuyos sistemas gestionan datos confidenciales. 

• ¿Quién necesita qué?: simplificar la gobernanza consolidando los permisos en un inicio de sesión para que los usuarios accedan solo a lo que necesitan desde una única interfaz de usuario, sin riesgo de tocar nada que no deban. 

7. Evolucionar: probar, testear, repetir

Con los stacks componibles los equipos pueden cumplir los plazos sin agotarse, ya que los componentes del sitio se dividen y gestionan por equipos especializados, cada uno capaz de moverse a su propia velocidad. Hay libertad para definir ciclos de iteración y apoyar la mejora continua en áreas específicas del sistema.

Consideraciones clave para la evolución: 

• Hacer cambios rápidos: los cambios pueden dirigirse a sistemas o partes de sistemas específicos, lo que permite realizarlos rápidamente. Hay que observar los cambios y responder a ellos a tiempo. 

• Realizar pequeños cambios: la componibilidad libera a los equipos de la necesidad de realizar implementaciones masivas con mil cambios que luego requieren una evaluación en profundidad para determinar su éxito. 

• Implementar cambios informados: las pruebas no deben ser un proceso aleatorio. Se debe supervisar el funcionamiento del sistema en tiempo real y realizar cambios basados en los datos, la empresa y los valores del usuario final. 

• Hacer cambios centrados en las personas: hay que tener en cuenta los comentarios, teniendo en cuenta que no todos requieren acción. A veces la gente solo quiere que la escuchen, pero hay que ser proactivo a la hora de hacer correcciones antes de que se conviertan en problemas para los clientes.

Aplyca y las soluciones composable

Si su organización tiene interés en implementar una solución composable como Contentful, hágalo de la mano de expertos. Lo invitamos a contactarnos. 

*Artículo tomado de: https://www.contentful.com/blog/7-steps-to-become-more-composable/